Todo empezo como algo inocente, de hecho ni siquiera es que emepezara porque
en realidad siempre habia estado conmigo.
Desde pequena he tenido una gran tendencia a sonar, a imaginar historias que
veo en mi cabeza como si fueran peliculas.
Es un metodo de compensar la falta de historias interesantes en mi vida.
Cuando me fijaba en alguien, imaginaba miles de escenas. Algunas empezaban parecidas
a las que nos unian en la vida real, pero me dedicaba a cambiar los comentarios,
cambiaba lo que no debia haber dicho, decia otra cosa que habria sido mejor,o
el decia lo que yo queria oir...
Otras veces eran situaciones totalmente inventadas, con la ilusion de que algun dia se cumplieran.
Luego creci, y aunque mi vida ha cambiado mucho sigo imaginando continuamente.
Mi mente no descansa nunca, no conoce el silencio.
Pero la fantasia me ha empezado a doler, he cometido el fallo de confundirla
con la realidad. Y al abrir los ojos me he dado cuenta de que todo es un espejismo
que me esta dominando.
Paladin me dijo una vez que si los suenos hacian dano a uno mismo dejaban de ser
inofensivos porque por su culpa podriamos hacer dano a los demas.
Nunca pense que la linea entre la realidad y la ficcion fuera tan fragil.
Ha llegado el momento de cortar las alas y volver a la Tierra...
